Aunque la dieta para personas con dificultades para tragar o disfagia debe ser diseñada teniendo en cuenta las características individuales de cada paciente, en general, debe cumplir las siguientes características:
- Que esté elaborada con alimentos que puedan triturarse formando texturas uniformes u homogéneas, evitando texturas gruesas que contengan grumos, huesecillos, espinas, filamentos o semillas de frutas y verduras.
- Que sean purés espesos, pero con una textura suave y uniforme, evitando dobles texturas, como sopas de fideos, batidos de kiwi o fresas, etc.
- Que su consistencia sea húmeda y resbaladiza con el fin de evitar que el puré quede retenido en la garganta.
- Que tenga una consistencia cohesiva es decir que no se divida o fragmente fácilmente
- Que no se pegue al paladar, como el puré de patata.
- Que cualquier líquido o salsa añadida sea tan espeso como el propio puré.